Compromiso total con la bici

Cualquier ciclista que lleve algún tiempo entrenando con cierta constancia se habrá dado cuenta de que para alcanzar un rendimiento aceptable se necesita disponer de un mínimo número de horas de entrenamiento a la semana, que normalmente son al menos 8. 

Suponiendo que fuesen 8 horas sobre la bici, se convierten en 10 u 11 horas si contamos el tiempo que dedicamos a vestirnos y desvestirnos, ducharnos, hacer cualquier arreglo en la bici o desplazarnos hasta el lugar de entrenamiento. 

Si tenemos en cuenta que la mayoría de estos ciclistas anónimos tienen un trabajo, una familia y otras tareas variadas que realizar a lo largo de la semana, nos daremos cuenta de que para encajar estas horas de dedicación a la bici hay que organizarse muy bien, haciendo del ciclismo un estilo de vida. Bien, pues para garantizarnos el éxito de nuestro plan de entrenamiento, es necesario que esta organización de la vida personal se realice con el mayor esmero y dedicación. 

En este sentido, la dificultad más importante se suele encontrar dentro de la familia, ya que -como es lógico- también quieren que el ciclista no sea sólo ciclista. Para ello, es muy importante que el entorno familiar conozca y acepte los objetivos del ciclista para poder compatibilizar la bici con la familia desde el principio. 

De este modo, evitaremos un sinfín de conflictos familiares cada sábado o domingo de entrenamiento en que tengamos que salir a entrenar durante toda la mañana. Además del tema familiar y de organización, es obvio que para conseguir unos buenos resultados no sólo basta con entrenar y descansar, ya que hay otra serie de factores del día a día que también influyen en el ren- dimiento y no se pueden pasar por alto, como, por ejemplo, la nutrición y las horas de sueño. 

Es importante al respecto plantearse la necesidad de llegar a dormir al menos 8 horas al día. Durante el sueño, es el momento del día en el que se segregan una gran cantidad de hormonas relacionadas con la recuperación. Equiparse adecuadamente es fundamental, no coger frío para que luego no te enfermes, en tiendabicis.net podemos encontrar equipaciones para los ciclista muy buenas

En cuanto a la nutrición, como ya se verá en el capítulo 9, es necesario conocer qué tipo de alimentación nos conviene seguir a fin de aportar al organismo los nutrientes necesarios para recuperarnos mejor de los entrenamientos y tener la energía necesaria para entrenar con intensidad. 

En este sentido, es importante adquirir hábitos de alimentación saludables. 

Además de la función propia de los alimentos, el ciclista también deberá ser muy cuidadoso respecto al control del peso corporal, ya que este factor está directamente implicado en el rendimiento. 

Por último, entrenar inteligentemente también supone llevar un registro de los entrenamientos realizados, lo cual nos supondrá también unos pocos minutos al día. Este registro y control del entrenamiento se hará preferentemente de manera informática, ya que así el análisis de los datos será mucho más sencillo de realizar. 

No obstante, con un cuaderno y un bolígrafo también podremos mantener un registro detallado de nuestros progresos. También es importante que el ciclista se preocupe por aprender y conocer más cosas referentes al ciclismo, al entrenamiento y a la nutrición. Cuantos más conocimientos se obtengan, mejor se podrá entrenar. La adquisición de un libro como éste ha sido un buen paso en este sentido, pero lo interesante para seguir aprendiendo es leer cuanto más mejor y de todo un poco: nutrición, biomecánica, fisiología… Si cada vez sabemos más sobre lo que sucede en nuestro organismo cuando nos ponemos a dar pedales seremos capaces de entrenar de forma más eficaz.

Un comentario en «Compromiso total con la bici»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *